Reseña | Choque de Reyes, George R. R. Martin

Choque de reyes / A Clash of Kings

Canción de hielo y fuego #2

George R. R. Martin

927 páginas

DEBOLS!ILLO (PRH)

Fantasía épica

Un cometa del color de la sangre hiende el cielo cargado de malos augurios. Y hay razones sobradas para pensar así: los Siete Reinos se ven sacudidos por las luchas intestinas entre los nobles por la sucesión al Trono de Hierro. En la otra orilla del Mar Angosto, la princesa Daenerys Targaryen conduce a su pueblo de jinetes salvajes a través del desierto. Y en los páramos helados del norte, más allá del Muro, un ejército implacable avanza hacia un territorio asolado por el caos y las guerras fratricidas. 

George R. R. Martin, con pulso firme y enérgico, nos deleita con un brillante despliegues de personajes, engranando una trama rica, densa y sorprendente. Nos vuelve testigos de luchas fratricidas, intrigas y traiciones palaciegas en una tierra maldita por la guerra, donde las fuerzas ocultas se alzan de nuevo y acechan para reinar en las noches del largo invierno que se avecina.  

Bienvenido nuevamente a los Siete Reinos, este continente plagado de luchas de poder, intriga, batallas, fuerzas místicas, ambientes oscuros y personajes inolvidables. Un cometa color sangre se ha posado en el cielo y todos los interpretan de distinta manera según la posición en la que se encuentran. En Desembarco del Rey Joffrey Baratheon, el primero de su nombre, sigue en el trono luego de que le cortaran la cabeza al honorable Eddard Stark por supuesta traición, pero no la tiene fácil porque se le avecinan más enemigos del que probablemente se imaginaba: en primer lugar el más obvio, Robb Stark y toda la tropa de norteños que busca vengar la muerte del que fuera el Guardián del Norte; en segundo lugar Renly Baratheon, el hermanito menor del difunto Rey Robert que busca hacerse con el trono a costa de todo; en tercer lugar, Stannis Baratheon, el otro hermanito menor de Robert, que al ser mayor que Renly busca sentarse en el trono por un tema de sucesión y derecho (así que sí, se viene una rencilla entre los dos hermanitos); y por último, el enemigo que pasa desapercibido en Poniente porque se encuentro al otro lado del Mar Angosto ganando terreno lento pero seguro, la princesa Daenerys Targaryen junto a sus tres bebes dragones, su leal consejero y amigo friendzoneado, Ser Jorah Mormont, y la tropa de Dothrakis que le siguieron luego de demostrar su valía como la Madre de dragones.

Asi que sí, el conflicto sigue y como pueden ver no tiene para cuando acabar.

Es segunda vez que leo Choque de Reyes, así que tal como sucedió con Juego de tronos, esta es una reseña de una relectura. Sin embargo, a pesar de que una relectura siempre va a significar redescubrir, mis sentimientos con este libro no han cambiado: en él mi encanto por la narrativa de Martin crece. Desde una mirada general, es probable que Choque de reyes no tenga la misma acción que Juego de tronos, pero la aparición de nuevos personajes junto a las profundización de las relaciones y de los conflictos hace que pueda disfrutar cada página. No por nada lo llené de marcadores guardando diálogos notables, frases que se adaptan a la vida real y otros momentos que es indicado guardar y destacar tanto por el carácter épico que tienen, como porque pueden significar una información útil para comprender mejor lo que puede venir en los siguientes libros y la misma historia de este mundo de Hielo y Fuego.

Mi personaje favorito de este libro al menos es y siempre será Tyrion, y pienso también que EL PERSONAJE del libro es él y nadie ni nada me podrá hacer pensar otra cosa.

En Juego de Tronos ya nos dieron una buena dosis de la picardía, sensibilidad e inteligencia de Tyrion Lannister, pero en este libro el personaje llega a hacerse cargo de la situación, a coger al toro por los cuernos que está más complicado que nunca luego del cagazo del niñato Joffrey. Tyrion será discriminado, subvalorado, bapuleado, puesto a prueba en un montón de oportunidades, pero hey, que toda su vida ha sido así, por lo que a Tyrion las cosas le terminan resultado no como quisiera, pero sí mejor de lo esperado, y cuidado, porque a nuestro Lannister parece que le quedará gustando el poder.

No obstante, por supuesto que Tyrion no es el único personaje a destacar. En este libro la admiraciónpor Arya Stark crece, y cómo no hacerlo si vemos como va creciendo y madurando al idearselas y juntar coraje para sobrevivir y hacerle frente a la posición que la ha dejado la muerte de su padre. Me gustaría destacar también a Sandor Clegane, que para mi es el personaje más significativo que encontramos en esta parte de la historia, y al igual que Sansa, empezamos a romper esa dura caparazón que proteje a un hombre que desde muy pequeño tuvo una vida muy dura y lo ha llevado a ser como es hoy. Y por último, mención especial a Jaime Lannister, que acá comenzamos a ver que no es el hijo de p*ta como la mayoría pensaba. De hecho, es probable que algo de lástima y cariño se le puede terminar agarrando.

Una vez más los personajes principales que menos me agradan son Sansa y Catelyn, aunque con Sansa me sucede que si bien a momentos me parece una niña totalmente insoportable, en otros me pongo en su lugar y siento pena por ella porque al final eso es, una niña, que creció esperando vivir un cuento de princesas que se rompió cuando vivió la traición y vio en primera fila como le cortaban la cabeza a su padre. Y con Catelyn, a pesar de que mantengo mi odio, algo de lástima le tengo y rescato la culpa que comienza a sentir y comprendo los aciertos y errores que comete desde su papel de madre que por una parte trata de guiar por el camino correcto a su hijo que se ha convertido en Rey en el Norte, y por otra parte deberá lidiar con el peso de tener a sus dos hijas con el enemigo y a sus dos pequeños hijos tratando de manejar las cosas en Invernalia.

En cuánto a la narrativa de Martin en este libro, como mencionaba al principio, mi admiración y encanto por ella crece porque el autor demuestra una vez más la capacidad que tiene de contar las situaciones de un modo que cada una de ellas está conectada a otra, siendo como hilos que si bien en un principio pareciera que no sabemos para dónde van, al final todo va calzando de forma que no quedan cabos sueltos ni situaciones irrelevantes. Todo está puesto en la historia por una razón. Y con los personajes es lo mismo. Es verdad que hay algunos capítulos que son más atractivos e interesantes que otros, pero al final todos terminan siendo necesarios porque nos muestran la perspectiva de cada rincón de este mundo.

¿Qué más se puede destacar de Choque de reyes? La inclusión de nuevos personajes y el protagonismo que van tomando. Cuando comenzaba la reseña mencioné a Renly, que tuvo algo de participación en Juego de Tronos, y a Stannis, solo mencionado un par de veces en aquel libro. Ambos tienen una participación muy significativa en este libro porque ambos son parte de esta Guerra de los cuatro reyes que se va a dar en Poniente, y se van a enfrentar porque cada uno cree tener todo para tomar el lugar que dejó Robert. Sin embargo, otros personajes vienen por su porción de torta en esta historia, como Davos Seaworth, mano derecha de Stannis y personaje al que Martin le entrega un capítulo para que el lector se situe en Rocadragón, el lugar donde habita el Baratheon y desde el que planea su asecho a Desembarco del Rey. Por lo que el caballero de la cebolla, como le dicen a Davos, será un personaje clave en este sentido.

Y de la misma manera que Davos, también vemos en acción al joven Theon Greyjoy que con sus capítulos nos dará otra perspectiva de la situación de la que se encuentra Robb Stark y sus tropas, y de los mismos conflictos personales que enfrenta Greyjoy.

Pero estos cuatro personaje no son los únicos que se van a agregar. Si pensaban que en Juego de tronos habían muchos nombres, en Choque de Reyes no bajen la guardia.

Por último, es importante mencionar que esta Guerra de los cuatro reyes no es lo único con lo que se sufre, porque más allá del Muro, las cosas se siguen poniendo complicadas, oscuras y frías con Juan de las Nieves y compañía. La guardia de la noche ha salido de expedición para saber en definitiva qué carajos pasa con Benjen Stark, pero hay una amenaza que está más cerca de lo que ni el cuervo del Viejo Oso Mormont imaginaba.

Y por su parte, Daenerys al otro lado del Mar Angosto tampoco la está viendo muy bonita, porque el viaje por el desierto los está empezando a disminuir tanto física como mentalmente, así que se las tendrán que arreglar y tendrán que encontrar un lugar como sea. Y es así como llegan a Qarth, una antigua y mística ciudad portuaria de Essos, que al contrario de traerle buenas cosas, más de algún problema asechara a la única sobreviviente Targaryen que será deseada y codiciada por las extrañas personas que tienen el poder de esta ciudad.

Y eso es todo lo que pretendo mencionarles porque sin querer se me puede salir algún spoiler y nadie quiere eso, ¿cierto?

“Es real, todo es real –pensó-, las guerras, las intrigas, este maldito juego… Y yo estoy en el centro de todo. Yo, el enano, el monstruo, aquel del que todos se reían, el blanco de las burlas… pero ahora lo tengo todo: el poder, la ciudad y la chica. Para esto nací, y que los dioses me perdonen, pero lo amo. “

En resumen, Choque de reyes es una gran continuación para todo el conflicto que se inicio en Juego de Tronos. Seguimos avanzando por los caminos que ya conocíamos y a la vez se nos introduce en otros nuevos que vendrán a enriquecer y agudizar más aún el caos. Si no son acérrimos a este tipo de narrativa, es un libro al que tendrán que tenerle paciencia porque las descripciones son muchas más ya que todo se va tejiendo afuera del campo de batalla, pero esto mismo hace que la intriga, los movimientos tácticos, las actitudes sucias y las tensiones se acrecienten. Es una narración que en ningún momento baja de nivel porque todo crece y crece como un globo que se llena de agua y en algún momento va a explotar. El juego de tronos continúa, y nosotros cada vez somos más participes de él.